Introducción

El mercado de microcréditos en México ha experimentado un gran crecimiento en las últimas décadas. Según HR Ratings, el incremento en cartera de la industria ha sido del 45% del 2016 al 2021 según reportado (Angel García, HR Ratings). Este tipo de financiamiento es especialmente útil para personas o negocios con acceso limitado a servicios financieros tradicionales, como los bancos. Los microcréditos suelen ser de monto pequeño y plazo corto, lo que los hace accesibles para personas de bajos ingresos. En muchos casos, estos van dirigidos a un segmento no bancarizado que inicia su actividad laboral y carece de ahorros. Sin embargo, también existen riesgos asociados con el uso de microcréditos, como la posibilidad de sobre-endeudamiento y la falta de regulación.

En Palenca, nos hemos dado a la tarea de comprender profundamente el ecosistema para asistir a las organizaciones involucradas hacia un mayor conocimiento de su mercado. Esto con el objetivo de ayudarlos a ofertar servicios financieros más accesibles y transparentes a aquellos en búsqueda de un auxilio económico. Por otro lado, ofrecer a las SICs y Burós posibilidad de captar una mayor proporción del mercado y mitigar el riesgo asociado a su negocio.

"Job Hopping"

Como parte inicial de nuestro análisis, pudimos observar datos relevantes vinculados al "Job-hopping" mexicano. El término alude a los individuos que se encuentran empleados dentro del sector formal y que posteriormente se retiran para trabajar en los sectores informales. Esto se puede atribuir a una serie de motivos que varían desde: alta rotación, oportunidades de crecimiento limitadas y bajos sueldos dentro del sector formal (por mencionar algunos ejemplos). El sector informal podría representar una fuente de ingreso, autonomía y flexibilidad más redituable para los mexicanos.

Para medir la proporción con la que los colaboradores migran del sector formal al informal utilizamos la variable de semanas cotizadas.

Las semanas cotizadas son aquellas semanas en las que un colaborador aportó de forma regular un monto tripartito al IMSS. En otras palabras, cuanto lleva una persona empleada en el sector formal. Este monto se utiliza para hacer un cálculo de vejez y con esto definir el monto correspondiente a la pensión, incapacidad o compensación obtenida por beneficiari@ de un/a tercer@ que haya fallecido.

A continuación, podremos ver gráficamente el análisis obtenido:

Lo que podemos observar a partir de una muestra de alrededor de 40,000 colaboradores mexicanos, es que existe una tendencia hacia caer en desempleo del 89%  al haber transcurrido solamente 1 año como colaborador formal. Esto implica que 9 de cada 10 colaboradores con menos de 52 semanas de cotización ante el IMSS se retiran del empleo formal. La tendencia es una rápida disminución hasta asentarse en 5 de cada 10 al cruzar las 250 semanas de cotización aproximadamente.

Pudimos concluir que la obtención de la variable "semanas cotizadas" es indispensable para la colocación de los micro-creditos. Sin duda la antigüedad laboral contiene mucho trasfondo que deja espacio para reflexionar.

Edad vs Empleo

Es lógico pensar que la vida laboral comienza a cierta edad y conforme tu edad progresa, es menos probable que dejes el trabajo formal (hasta cierto punto). Esto tiene que ver con los proyectos de vida personal, los programas laborales de retención y el costo de vida incremental. Sin embargo, un análisis realizado sobre la misma muestra anterior, revela que esto no debería de ser tan notorio.

En dicho análisis se identificó que la mitad de la población que se mantiene empleada tiende a bajar a lo largo de los años. Solamente el 52% de los colaboradores que comienzan su vida profesional a los 20 años se encuentra formalmente empleada y esto tiende a disminuir y con mayor frecuencia a los cumplir los 60 años de edad. En este punto la caída es más drástica lo cual puede ser parcialmente explicado por la entrada en una edad de jubilación válida (al menos para población nacida antes de 1997).  A pesar de que esto es cierto, aquellos que se encuentra retirados/jubilados no rebasan el 20% del total. Es decir, en muchos casos nunca fueron o serán acreedores a esta prestación.

Para el mundo crediticio, esto implica operar en un mercado que se encuentra desempleado formalmente en un 50% y no rebasa dicha tasa. Aunque naturalmente esto viene como parte del riesgo asumido por las organizaciones, el tener visibilidad respecto a exactamente quién se encuentra dentro de dicho 50% altera significativamente los flujos de decisión y las condiciones de crédito. En general, potencialmente afecta todo el modelo de negocio.

Conclusión

Podemos concluir que el panorama es ampliamente más incierto de lo que parece al entrar en este sector. Sin embargo, el objetivo no es visibilizar el riesgo sino visibilizar los componentes del riesgo adquirido para una mejor toma de decisiones. En otras palabras, conocer el comportamiento probable del mercado que se atiende permite maniobrar y reducir su riesgo. Finalmente, el tener visibilidad respecto a estas variables nos permite reflexionar sobre todas aquellas que hay allá afuera y no consideramos.

Lo invisible se vuelve visible, un dato a la vez.